Autocuidados en tiempos desafiantes - Mi Vida en mis Manos
Autocuidados en tiempos desafiantes

Autocuidados en tiempos desafiantes

Las cosas como son, este año ha sido un desafío para todos nosotros, que nos ha empujado a salir de nuestras zonas de confort, a enfrentarnos a miedos y dolor, aceptar, transmutar… y seguir creciendo. Porque en última instancia, cada desafío alberga en si una oportunidad.

Por supuesto también nos podemos quedar en modo víctima y culpar el Universo, al Gobierno o al vecino de nuestro malestar, pero no escribo para este marco mental.

Independientemente del año en el que nos encontramos, nuestros desafíos seguirán a lo largo de nuestra vida, por que mientras que respiremos en este maravilloso cuerpo y en esta extraordinaria experiencia humana, se nos otorga la oportunidad de seguir descubriendo preciosos tesoros internos, ir afinando y refinando nuestro Ser.

Mi “Lista de Anclaje”

Te comparto un ejercicio que durante el mes pasado he puesto en marcha con mis clientes, porque me parece un recurso de primeros auxilios para los tiempos agitados que corren.

Igual que muchas personas tienen en su frigorífico pegado una lista de farmacias de 24 horas y otros números de teléfono importantes, puedes elaborar una lista con tus propios recursos para volver a equilibrarte.

Son tiempos altamente desafiantes a muchos niveles de nuestra existencia.

Tener unos recursos que nos ayudan a permanecer en nuestro centro y bien arraigados como un árbol sano, nos ayudará muchísimo a no caer por precipicios oscuros (miedos, ansiedad, insomnio y pesadillas, pensamientos recurrentes o tristezas para solo nombrar algunos de nuestros monstruitos al acecho).

Es decir, tu lista es tanto preventiva, para mantenerte fuerte, como también es reconstituyente, para volver a tu centro cuando has perdido el equilibrio.

Toma tu tiempo, papel y lápiz y apunta estas cosas que te ayudan a mantenerte en tu centro, a conectarte contigo misma. Sería ideal que fuesen recursos internos, no externos (como por ejemplo redes sociales).

Cuando tengas la lista, la dejas en un sitio visible. La próxima vez que te sientes perdida y fuera de tu centro – y por lo tanto normalmente bloqueada – ve a tu “lista de anclaje” y elige una o varias actividades que te ayudan a volver a conectarte contigo misma.

Después de una “toma de antídoto”, un paseo de 2 horas por la playa otoñal, las energías están recargadas y limpias

¿Cuál es tu antídoto?

Los míos son dormir, soñar, escribir, bailar, pintar, andar rápido, “desfogar” con la bici, estar en la naturaleza, meter los dedos en la tierra, coger conchas en la playa, mirar a los ojos de mis perritos, ver el cielo abierto, una puesta de sol o un amanecer, reír, abrazar, meditar, cantar… ¡e incluso ordenar!

Cuidar a la niña interior / Cuidar al niño interior

Cuando reaccionamos emocionalmente ante una determinada situación, muchas veces es nuestr@ niñ@ interior que pide a gritos ser visto. E igual que decidamos cariño y atención a nuestros hijos físicos, podemos escuchar nuestras necesidades que no se cubrieron cuando éramos niños.

Es un tema muy vasto y si quieres profundizar en ello, te invito a una Sesión de descubrimiento gratuita online.

Para dar unas pinceladas, podemos tener necesidades no cubiertas por parte de nuestra mamá o de nuestro papá, es decir energías femeninas o masculinas.

Cuando estamos bien centrados en nosotros como adultos podemos auto-procurarnos estas energías y cuidados. Ambos sexos necesitamos ambas energías para estar equilibrados.

Autocuidados para calmar al niño interior

Cuando reaccionamos emocionalmente a una situación, se nos activa un “punto gatillo” de malestar de algo, que la mayoría de las veces tiene su origen en nuestra infancia.

Muchos de nosotros tenemos necesidades emocionales no cubiertas de cuando éramos niños, sentirnos no vistos, no escuchados, no amados, no aceptados como somos y un largo etcétera de situaciones dolorosas que se nos repiten de una forma u otra siendo adultos, hasta que hayamos primero identificado y aceptado este “dolor original”, para luego sanarlo.

Como dije, es un vasto tema que requiere tiempo de dedicación. Para hacerte una idea, primero hay que prestarle atención a este niño cuando surge una emoción fuerte.

¿Qué emoción siento? ¿Cómo me siento? ¿Qué necesito? ¿Cómo puedo procurármelo yo misma?

Te doy un ejemplo. Imagínate que estás frustrada porque el hombre que te gusta no devuelve tus mensajes. Además de tener allí un excelente material sobre la Ley del Espejo, ahora nos centramos en lo qué siente la niña interior (¿Rabia? ¿Frustración? ¿Tristeza etc.?). ¿Qué necesita esta niña interior? (¿Que la vean, cuiden, mimen, reconozcan…?) De quién lo necesitamos, ¿de nuestra mamá, de nuestro papá? ¿Cómo me lo puedo procurar a mí misma?

Si la niña necesita por ejemplo mimos y sentirse cuidada, es más bien una energía materna femenina que ella puede brindarse a sí misma, por ejemplo, con un baño caliente, una ducha, ponerse crema, darse un masaje, tomar un cacao caliente etc.

Unas preguntas clave serían «¿dónde me niego a mi misma cuidarme y escuchar mis necesidades? En que lugar de preferencia me pongo a mi misma?»

Si la niña necesita sentirse respaldada y reconocida, es energía masculina paterna que ella misma puede procurarse, a través el reconocimiento consciente de sus muchos logros. (¡Si, a diario acumulamos muchísimos logros sin darnos ni cuenta o les restamos importancia!). Puede practicar a físicamente fortalecer su espalda por ejemplo mediante ejercicios de Yoga. Puede confeccionar una lista de frases poderosas que le gustaría que su padre dijera para darle ánimo.

Las preguntas clave aquí serían «¿donde no me posiciono en una situación (asertividad), dónde no soy fiel a mi misma?»

Estos son solo unos ejemplos, que se confeccionan de forma totalmente personal según la necesidad de cada uno.

Comenzar Ahora

Es la afirmación clásica, pero por eso no deja de ser verdad: El momento es ¡AHORA!

Es un hecho muy curioso, pero todo lo que proyectamos hacia mañana, será muy, muy difícil que se materialice. Porque nuestro subconsciente lo registra tal cual. Mañana. Y mañana siempre será el día siguiente al de hoy. Por lo tanto, aquello lo que quiero conseguir, siempre estará a un paso de mí, en el futuro, y de hecho, este “mañana” rara vez se convierte en “hoy”. De manera, para romper este círculo vicioso, hay que programar cualquier acción para HOY. Hoy es el día. Este es el momento.

Artículos relacionados:

El Yin y el Yang de la Auto-compasión

La Ley del Espejo

… y un pequeño obsequio…

¿Quieres emprender el emocionante viaje de Amor Propio, de aceptarte y respetarte con todas tus luces y sombras?

Soy Kerstin Godchild, Psicóloga Transpersonal y te acompañaré en este viaje íntimo hacia ti misma.

Si quieres conocerme y saber cómo trabajo, solicita una Sesión de Descubrimiento gratuita en el formulario más abajo.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.